¿Cómo limpiar un sofá en seco?

Hoy desde Molinero Cózar te contamos los mejores trucos para que sepas cómo limpiar un sofá en seco y que quede perfecto.

Limpiar un sofá en seco es una de las mejores opciones cuando se trata de telas delicadas o de aquellas que con el paso de los años han perdido su resistencia. Este tipo de limpieza es ideal para prolongar la vida útil de todo tipo de sofás y es fácil de hacer en casa, por lo que podrás ahorrar tiempo y dinero sin necesidad de trasladarlo a ninguna parte o contratar algún servicio.

Sin embargo, para hacerlo correctamente existen una serie de pasos y reglas que debes seguir previamente, ya que usar productos inadecuados o saltarse algún paso puede implicar un riesgo para tu mueble. Por eso hoy te hemos traído 5 sencillos pasos para que sepas cómo limpiar tu sofá en seco:

1. Revisa la etiqueta e indicaciones de tu sofá

Antes que todo te aconsejamos que le eches un vistazo a la etiqueta o ficha técnica de tu sofá, ya que aquí es donde usualmente podrás ver la información básica de su tipo de tela. Así como cuáles son las formas de lavado recomendadas por el fabricante, ya sea a mano, con agua fría, tibia o caliente. Además del tipo de productos recomendados y los que no.

Si no tienes a mano este tipo de información y solo conoces el tipo de tejido o el modelo de tu sofá, puedes hacer una pequeña búsqueda en la página web de su fabricante. Si tampoco tienes esto a tu disposición, no te preocupes, existe un truco para saber si tu sofá es apto para el lavado en seco rápidamente:

• Primero, selecciona una parte discreta de tu sofá que puedas ensuciar momentáneamente, como lo pueden ser debajo de los cojines o en el reposabrazos.
• Segundo, pon un poco de detergente con el que planeas lavar en seco.
• Tercero, frota con un hisopo en la zona y si a este se le traspasa la suciedad que tenía el mueble, significa que puede ser lavado en seco.

2. Consigue los productos y herramientas de limpieza adecuados

Existen múltiples productos de limpieza para sofás, sin embargo, para el lavado en seco deberás escoger los correctos. Sin necesidad de hablar de precios o marcas específicas, lo ideal es que estos sean a base de estos dos químicos:

• Limpieza con percloroetileno: los productos con este químico son frecuentemente utilizados por tintorerías por su efectividad para remover la suciedad. Lo recomendable es no exceder las cantidades necesarias y si se quiere diluir con un poco de agua fría. Lo recomendable para la limpieza en seco es optar por opciones en espuma o spray.
• Limpieza con éteres de glicol: los productos a base de este químico son un poco más suaves que los de percloroetileno y más recomendables para las limpiezas en casa. Son ideales para la limpieza en seco y remueven la suciedad con facilidad.

Una vez consigas los productos adecuados, adicionalmente podrás implementar herramientas para tu limpieza, que si bien no son obligatorias para un lavado en seco, te brindarán una ayuda extra. Algunas de ellas son:

• Aspiradora
• Esponja
• Toalla de algodón o microfibra
• Cepillo suave
• Recipiente con agua
• Rociador

3. Preparación del sofá antes de la limpieza

Si ya tienes las herramientas y productos a la mano, tendrás la mitad del trabajo hecho, sin embargo, una recomendación antes de comenzar con la limpieza es preparar el sofá previamente. Para esto necesitarás la ayuda de una aspiradora o de un cepillo suave y seco, con esto removerás toda la suciedad en su superficie y así no tendrás obstáculos en la limpieza definitiva.

4. Limpieza

Llegó la hora de hacer la limpieza en seco. Necesitarás el producto que escogiste previamente, preferiblemente vertido en un envase con rociador diluido en agua. Aplica el producto en cantidades moderadas por todo el sofá e inicia la limpieza con la ayuda de una toalla de algodón o de un cepillo suave y húmedo. Siempre con delicadeza para no crear daños en la tela.

Una vez hecho esto, retira los excesos con la ayuda de una toalla húmeda y el recipiente con agua, cuando notes que la toalla está muy sucia o llena de jabón, enjuaga en agua, exprime y repite el proceso hasta que no quede ningún resto.

5. Secado

Por último y no menos importante es su secado. Esta es una parte que no se debe descuidar si se quiere mantener el sofá en óptimas condiciones. Lo recomendable es un secado al aire libre para evitar daños a su tapizado. Pero, sin entrar en contacto directo con el sol, ya que esto puede generar daños aún peores. Una opción podría ser secarlo al aire libre bajo la sombra o en el caso de los apartamentos, frente a las ventanas. Si te interesa conocer más sobre el cuidado de tus sofás o estás interesado en adquirir uno nuevo, en nuestra Tienda de muebles en Pamplona somos especialistas y podremos asesorarte en lo que necesites. Contacta con nosotros ¡Te esperamos!